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domingo, 26 de marzo de 2017

Sopa Reparadora: alimento para tu intestino



Para estas noches frías que han vuelto, en esta incipiente primavera, una sopa con muchos nutrientes, rica en minerales, antioxidantes, calentadora del organismo y reconstituyente.

He metido vegetales de temporada: la coliflor, (vegetal muy rico en calcio y de fácil absorción en crucíferas), puerro (rico en azufre, indicado para evitar infecciones),  zanahoria (rica en carotenoides, indicados para la salud de nuestros tejidos y ojos, depurativa y remineralizante) y patata prebiótica (estupendo alimento para la salud de la microbiota intestinal. Ayuda a fortalecer el sistema inmunológico). Para aliñar en el último momento y así hacernos con todas las propiedades de éste, perejil, rico en vitamina K, C, A y minerales como el magnesio, hierro y calcio.
Lleva especias como el laurel, pimentón, cúrcuma y pimienta.

Es un caldo antiinflamatorio, recomendado en problemas de dolores óseos, musculares, articulares, resfriados, procesos gripales.

Los vegetales son los reyes de este fin y especialmente, los que lleva incluida esta sopa. Pero el rey de este efecto, sobre todos los demás, se le atribuye a la amarillísima cúrcuma. Tiene la capacidad de antiinflamatorio natural, tanto como muchos de los medicamentos que se toman para esto, pero sin los efectos secundarios de los últimos. Si además se conjuga con un poco de pimenta, esta capacidad aumenta hasta 3000 veces más. Tanto que se está utilizando en medicina natural, en forma de cápsulas, en patologías como las artritis, hipotiroidismo de hashimoto, problemas metabólicos...etc. Tiene propiedades anticancerígenas, la doctora Odil Fernández lo sabe muy bien.

 La podemos utilizar en forma de raíz o deshidratada en polvo. Lo importante es no cocinarla demasiado y mezclarla con un poco de pimienta y aceite de buena calidad, de esta forma es como más se potencia su acción.

Además, esta sopa lleva un fácil, rápido y reparador caldo de espinas. Como el de huesos, desde hace generaciones, se ha utilizado para enriquecer platos de cuchara y aportar nutrientes extras al organismo de fácil absorción. Es hidratante y reconstituyente porque además de agua, aporta minerales, imprescindibles para que nuestros tejidos, nuestra piel no se deshidraten y nuestros riñones realicen bien su función.

La sencillez de una "simple" sopa, todo lo que por nosotros puede hacer.

Ingredientes: 

  • Media coliflor. (Rallamos con la parte gruesa del rallador, la parte de la flor). El tronco lo podemos dejar para una crema.
  • Una patata mediana. La cocinamos al vapor o hervida el día antes y la habremos metido en el frigo. Abajo explico el beneficio que trae esto para nuestra salud.
  • La parte blanca de un puerro grande cortada en trocitos pequeños.
  • Una zanahoria pequeña cortada en trocitos pequeños.
  • Tres dientes de ajos picados finos
  • Un buen puñado de perejil fresco picado finito.
  • Una hoja de laurel.
  • Media cucharada de postre de pimentón de la Vera.
  • Media cuacharadita de postre de cúrcuma.
  • Una pizca de pimienta negra. 
  • Sal.
  • Aceite de oliva Virgen Extra. 
  •  Caldo de pescado: Espinas y cabezas, vinagre, vegetales varios que nos gusten.
Para hacer el caldo: Añadimos agua fría hasta cubrir el contenido, vegetales que vayamos a utilizar y una cucharada sopera de vinagre. Ésta extrae los minerales de las espinas y cabezas hacia el agua. No añadimos sal al principio, para facilitar este proceso. Hervimos al máximo y espumamos el caldo hasta que deje de salir espuma. Después tapamos y dejamos hervir 20 minutos a fuego lento. Cuando termine lo colamos y listo para utilizar. Podemos hacer buena cantidad y congelar para ir tirando de él.

En una cazuela, salteamos el puerro y uno de los ajos hasta que queden blandos. Añadimos la coliflor y la zanahoria y seguimos salteando y moviendo con la cuchara de palo. Después de tres minutos añadimos el laurel, el pimentón y el caldo, hasta cubrir los vegetales. Dejamos hervir, hasta que éstos estén tiernos. No tarda mucho, en unos 10 minutos está hecho. Antes de apagar el fuego, añadimos la patata en cubos, sal, el perejil, los ajos restantes, la cúrcuma, la pimienta y un buen chorro de aceite de oliva y dejamos hervir a fuego bajo tes minutos. Apagamos y dejamos reposar unos cinco minutos.
Servir caliente.



Patata del día anterior. Alimento PREBIÓTICO:

Desde hace siglos es sabido lo importante que es la salud de nuestro intestino y esto, en la actualidad, está siendo corroborado con multitud de estudios científicos. Los microorganismos que habitan nuestros intestinos tienen vida propia y se alimentan de lo que nosotros comemos, a cambio ellos nos cuidan y mantienen nuestra salud. Se sabe que son capaces de controlar el metabolismo, la salud del sistema nervioso, ayudan en la detoxificación de nuestro cuerpo, entre otras funciones. Se ha comprobado que cuando existen alteraciones en los microorganismos del intestino, existe una mayor predisposición a padecer ciertas enfermedades como: obesidad, diabetes, alergias, depresión, entre otras.

Hay varios factores que influyen en la salud de la microbiota intestinal. (Más adelante hablaré un poquito más de esto). Una es que la alimentemos bien y para ello, les encante la fibra soluble. La de los alimentos naturales. Aquí es donde entra en juego nuestra patata cocinada del día anterior. Ya que de esta forma y refrigerada, el almidón de ésta pasa a ser almidón tipo tres. Alimento inmejorable para las bacterias buenas del intestino. Promoviendo esto, la capacidad de prevenir  ciertas patologías.

Por ello, si quieres hacerte con los beneficios del mejor almidón para alimentar a tu microbiota, cocina la patata con piel, métela en el frigo y prepara al día siguiente el plato que quieras. Puedes volver a recalentarla sin que pase los 130 grados. De esta forma sigue siendo buen alimento para tus bacterias y además con mucha  menor carga glucémica, ya que ese almidón retrógrado en el que se ha convertido en tu frigorífico, no se absorbe de igual forma que el inicial. Por esto, se puede decir que la patata así, engorda menos;).






martes, 21 de marzo de 2017

Milhojas de manzana con crema de nutella-nocilla. Fácil y sencilla, ¿te apuntas a merendar?




 



Desde no hace mucho, ha tomado protagonismo que el aceite de palma que llevan los productos procesados, especialmente los productos para bebés y niños, es una grasa muy perjudicial para la salud. Y sin embargo, no se nos cuenta que otras grasas como los aceites vegetales que lleva cualquier lata de conserva, o el aceite de girasol recalentado de las magdalenas que nos venden como sanas, que los aceites hidrogenados de cualquier galleta que compremos, es igual de tóxica que el de palma. Incluso el aceite de girasol que se compra para cocinar, por ser más barato y sin saber que al final le sale caro a nuestra salud.

Me parece muy buena idea la iniciativa de los colegios de intentar introducir buenos hábitos alimenticios, haciendo un plan de merienda saludable de media mañana. El problema de esta iniciativa es que en los casos que conozco, se queda coja ya que no se da importancia, en absoluto, a la calidad de los productos que forman esas meriendas. Se basa en intentar que las familias alimentemos mejor a nuestros hijos y los alejemos de la bollería y las grasas de mala reputación. Sin embargo, a las familias no se les explica, que la procedencia-fabricación-calidad de los productos marca la diferencia, por lo que, de esta forma, el esfuerzo de que los niños se alimenten bien es inútil.

Pongo el ejemplo de mi hija:
A lo largo de la semana tiene que llevar:

Lunes a elegir.

Martes: bocadillo.  Sin más explicación de cómo debería ser un bocadillo sano. Las alternativas más habituales son de pan blanco o de molde. Estas harinas blancas están relacionadas con sobrepeso y obesidad en nuestro país. Y si hablamos de los rellenos: jamón york, mortadela, salami, queso para untar, cremas de cacaos y chocolates varios ( dan igual marcas conocidas o marcas blancas), todos tienen grasas trans, sal refinada y azúcar entre otros, aunque sean rellenos salados.


Miércoles: galletas. Por favor coged los ingredientes de cualquier producto de bollería que os guste y compararlo con los de cualquier paquete de galletas que nos venden...PREMIO!! Pero si son los mismos ingredientes. Pues sí, las galletas no son más saludables que la bollería. De hecho se podrían catalogar como bollería, desde el punto de vista perjudicial para la salud.

Jueves: fruta. Esto sí nos vale.

Viernes: lácteos. Pettit suisse, quesos grasísimos  para untar con unos palitos, yogures bebibles, mi primer "yogurcito", quesitos," minis ..."
Éstos no son lácteos. No están hechos con leche de calidad, llevan mucho azúcar, sal refinada, conservantes, colorantes, grasas de mala calidad...de verdad éstos no son lácteos. Los lácteos de verdad llevan buena leche, de vacas o cabras, criadas al aire libre, no hormonadas para que den más producción, ni tratadas y alimentadas a piensos, son animales herbívoros!!!
Los yogures de verdad, están hechos como se hacían antes, sólo con dos ingredientes: leche de buena calidad con su grasa natural y fermento. (Y os puedo asegurar que no necesitan azúcar añadido, ni colores varios para comerlos. Son naturalmente dulces, cremosos y muy blancos... riquísimos.)
El queso se hace con leche de buena calidad, sal y cuajo. Y ya. Siempre se hizo así. Con su grasa natural, que para nada nos hace enfermar, ni engordar, como se nos ha estado diciendo siempre.
Kéfir, leche fermentada naturalmente de 24 horas, que se puede hacer en casa. Innumerables beneficios para la salud de nuestro intestino en particular y de todo el cuerpo en general. (En la página del ministerio de Sanidad, tenemos cómo hacerlo con leche cruda (realmente la que mayores beneficios aporta) en casa, y habla de todo lo bueno de este líquido blanco.

Esta concienciación debemos hacerla entre todos, sanitarios, gobiernos y familias. Es un gran problema el de nuestra sociedad. La gran pandemia de sobrepeso y obesidad va a más si no dejamos de consumir a diario estos productos. Los niños, los más perjudicados.

Pido un poco más de formacion-información, para que lo que se hace tenga algún sentido. Que profesionales del tema sean quienes se encarguen de recomendar estas pautas porque si no, lo que se hace es liar más a las familias y dar una información errónea a los más peques, ya desde el principio, de lo que es o no saludable. 

... Y no, los genes no tienen la culpa, éstos se mantienen a raya con buena alimentación y buen estilo de vida...esto ya está más que demostrado...



 Ingredientes para la crema de cacao:

  • Dos cucharadas soperas de cacao en polvo 100% sin azúcar.
  • Dos cucharadas soperas de crema de avellanas sin azúcar.
  • Las semillas de media rama de vainilla.
  • Una cucharada sopera de miel cruda. (Importante que sea cruda para que mantenga todas las propiedades de la miel, si no es así, sería como cualquier otro azúcar.) Si te gusta más dulce, puedes añadirle más miel.
 Empezamos mezclando todo y triturándolo con una batidora. Si te cuesta trabajo hacerlo, añade un poquito de agua o bebida vegetal que tengas, hasta que quede una crema fina. En mi caso, me gustan los tropezones de avellanas y he añadido trocitos de avellanas sin triturar.


 Ingredientes Milhojas:
(Una ración)

  • Media manzana con su piel, si es eco.
  • Unas fresas cortadas en finas rodajas.
  • Canela en polvo.
  • Virutas de chocolate.
  • Zumo de limón.

Descorazonamos la manzana y la cortamos por la mitad. De cada mitad, sacamos una ración. Vamos cortando, con una mandolina o cuchillo de vegetales, lascas finas de 1mm, más menos. Las rociamos con el zumo de limòn. Preparamos una sartén con un poquito de aceite de coco bien repartido y hacemos las manzanas a la plancha por los dos lados. Cuando están blanditas, alrededor de un minuto, las sacamos y montamos el plato.

Sobre la primera rodaja de manzana, untamos por encima con la crema de cacao. Ponemos otra rodaja de manzana y seguimos haciendo lo mismo hasta poner la última capa. En ésta última, le ponemos un pegote de crema en el centro de la rodaja y vamos colocando las láminas de fresas alrededor del pegote, cayendo hacia la primera capa de manzana.






Para terminar se rocía con canela en polvo y se ralla un poco de chocolate negro al 90% por encima.
Además lo he adornado con unos copos de coco rallado y unas cazuelitas de chocolate caseras.











sábado, 18 de marzo de 2017

CHOCOLATÍSIMO RELLENO CON BASE CRUJIENTE







¿Te gusta el chocolate?... Me encanta...

Los postres que más me gustan, son aquellos que están hechos con cacao. Bombones, brownies, cremas de chocolate...
Por suerte y para los que no podemos/queremos tomar azúcar, dulces, bollería al uso, estos postres son muy fáciles de versionar de forma saludable;)


Mi intención es ir plublicando recetas en las que el protagonista es este adorado manjar, por muchos. Estas recetas, claro está, serán sin azúcar, sin gluten, muchas sin huevos (para aquellas personas que no pueden tomarlos por intolerancias y alergias),están hechas con grasas saludables, no inflamatorias y con productos nutritivos y propiedades para nuestra salud.

La receta de hoy es un chocolate relleno de caramelo de dátil y avellanas, con base crujiente de sarraceno inflado. Podemos utilizar el fruto seco que queramos o no añadirle el cereal inflado si no nos gusta.
No le tiene ninguna envidia a ninguno de los chocolates-bombonoes que hayáis probado. Con textura de chocolate crujiente, relleno de crema dulce y untuosa y todo sobre una base de sarraceno aún más crujiente, lo hace delicioso.
Lo mejor es que es un capricho por el que no te sientes culpable, ya que todos sus ingredientes hacen que sea saludable.
Desde el maravilloso cacao puro, uno de los antioxidantes mayores que la naturaleza nos aporta, con inmejorables efectos sobre el sistema cardiovascular y nuestro cerebro. El aceite de coco virgen, que como ya he dicho en otra entrada, es estupendo entre otras cosas, porque nos aporta energía rápida de muy buena calidad, con capacidad termogénica (capaz de aumentar nuestro metabolismo.) Los dátiles Medjool, los cuales son tiernos y jugosos y desde mi punto de vista, no tan dulzones como el Noir pero con muchas posibilidades en la cocina. Por otra parte, al ir con todas sus propiedades y fibra, lo hace un estupendo endulzante frente a cualquier otro azúcar. La ralladura de naranja, además del sabor es una delicia cuando se mezcla con el chocolate y le aporta vitamina C a este dulce. En la piel de los cítricos es donde más cantidad existe de esta vitamina y además le da frescor al sabor intenso del cacao.

De forma sana y, como vamos a ver, fácil de crear, sin todos los productos perjudiciales que la industria alimentaria trae a nuestra mesa. Todos los chocolates que la industria vende, están cargados de azúcar y grasas trans : aceite de palma, aceite de oliva refinado, aceite de girasol, aceites vegetales, otros aceites vegetales  refinados, aceites hidrogenados, aceites parcialmente hidrogeneados...algunos nombres con los que pueden venir detalladas estas grasas tóxicas entre los ingredientes.

Si os parece, no vamos a a demorar más la receta de hoy:

Necesitaremos una medida que elijamos. Yo lo hice con un vasito de vino.

Y los siguientes ingredientes:

  • 2 medidas de cacao puro en polvo sin endulzante.
  • 1/4 de medida de miel cruda.
  • 5 dátiles Medjool. Se puede utilizar cualquier otra variedad o fruta seca que te guste.
  • 1 rama de vainilla
  • Ralladura de 1 naranja.
  • Una pizca de sal.
  • Una torta de sarraceno inflado o un puñado de otro cereal inflado.
  • 1 puñado de pistachos u otro fruto seco que te guste.
  • 2 medidas de aceite de coco.
  • 2 cucharadas soperas colmadas de crema de avellanas sin azúcar, ni aditivos. Se puede hacer en casa con una picadora potente (picando a gran velocidad las avellanas, muy ligeramente tostadas. (Cuidado, que si nos pasamos de calor, pasan a ser inflamatorias.) 
  • Fresas liofilizadas o deshidratadas. 
  • Un par de onzas de chocolate negro al 90%



    Fundimos el aceite de coco al baño María y cuando está le añadimos  el cacao, la miel, la vainilla, la pizca de sal y la ralladura de naranja. Mezclamos bien para que se integren los ingredientes.

    Por otro lado hacemos una crema dulce con el dátil, lo trituramos con un chorrito pequeño de bebida vegetal o agua. Si éstos estuvieran muy secos, habría que hidratarlos con aterioridad en un poco de agua o bebida vegetal. Cuando están bien triturados y tenemos una crema fina, espesa y untuosa, añadimos la crema de avellanas y batimos.



Trituramos la torta de sarraceno, sin deshacerla mucho.Deberían quedar trocitos que se puedan morder, y la reservamos.

Montamos el chocolate:

Necesitamos un molde de chocolate o cake pequeño o un tetrabrik cortado longitudinalmente.

Añadimos la mitad del chocolate fundido que hicimos al principio y lo metemos en la nevera hasta que solidifique. Cuando está duro, repartimos por encima de esta primera capa, la crema de dátil y avellanas y alisamos para que quede uniformemente repartida. Después, el resto de chocolate que nos quedaba, lo mezclamos con el sarraceno inflado y los trozos de pistachos, estando a temperatura ambiente para que el arroz se mantenga crujiente, y lo añadimos encima de la crema de dátil y avellanas. Lo introducimos en la nevera y esperamos a que endurezca.

Una vez que está sólido y consistente, derretid al baño María las onzas de chocolate con una cucharada sopera de aceite de oliva virgen extra. Mezclar bien. Desmoldamos el chocolate y con una cuchara vamos vertiendo esta cobertura, haciendo dibujos  encima del chocolate, para que antes de que llegue a solidificar, dejar caer encima, unas fresas liofilizadas, deshidratadas, pasas, frutos secos, semillas...lo que nos guste o tengamos.

Una vez hecho este último paso y la cobertura está sólida, ya podemos disfrutarlo...








jueves, 22 de septiembre de 2016

Carne de cerca y bien "criá".

 

CARNE DE CERCA Y BIEN “CRIÁ”.

Constantemente aparece la tesitura de qué es más sano, si una alimentación vegetariana u omnívora.
No hace mucho, la OMS lanzó un comunicado en el que relacionaba a la carne roja con la posibilidad de padecer cáncer. Aún así, muchos Nutricionistas y gente entendida en la materia, no parecen compartir una misma opinión sobre el tema. Primero porque los estudios de donde vienen tales afirmaciones, no son muy concluyentes, son estudios epidemiológicos observacionales de los que no se puede extraer una conclusión final, sino hipótesis que después se tienen que validar.       









Por otro lado en dichos estudios, no se ha tenido en cuenta la calidad de esa carne, es decir, que los animales de los que proceden dichas carnes, no han tenido una crianza acorde con su especie: han estado hacinados, han crecido con alimentos de mala calidad, han sido hormonados, les han administrado antibióticos... Se ha metido en el mismo saco a un cerdo de montanera y a su compañero de la granja de crianza masiva. Nuestra especie, hasta hace muy poco, nunca se ha alimentado con animales criados de esta forma. Todo lo que el animal come, toma o le ponen, pasa al que lo consume.






También se ha medido de igual forma a la carne procesada. No se puede comparar un buen solomillo de animales criados en libertad, con una hamburguesa de cualquier local de comida rápida, ya que a éstas se les añaden numerosos saborizantes, azúcares, grasas trans, conservantes... tremendamente perjudiciales para nuestra salud. Y dicho esto, tampoco creo que hubiera que poner en la misma balanza al jamón de bellota o al embutido hecho en casa, que provienen de un animal bien alimentado y en libertad y sin productos químicos como los conservantes y azúcares (por muy procesados que sean), con el resto de embutidos que podemos encontrar en una gran superficie, como la mortadela o incluso salchichones y chorizos que vienen cargados de azúcar y otros químicos, en los que no encuentras la carne de calidad por ningún lado.






No me voy a posicionar en ninguna de las formas de alimentación, puesto que personalmente creo que lo mejor es aunar ambos tipos. Creo que es más una cuestión personal, de la calidad de los alimentos, equilibrio de nutrientes y alimento que predomine en cada una de ellas. Y si la carne no gusta, por principios o ideología no se quiere consumir, o no se puede permitir una carne de calidad, pues tampoco es imprescindible. Siempre se puede sustituir por otros tipos de proteínas saludables y completas, tanto animal como vegetal. Eso sí, tanto una forma de alimentarse como la otra, deben estar bien planificadas.









Esta introducción, para hablar de carne de ternera, de carne de calidad. De la que se cría en libertad, con pastos y en un paraje excepcional, en pura Dehesa Extremeña. Un paraje en constante equilibrio entre la flora y la fauna que coexisten en ella. Este lugar se encuentra en Oliva de Plasencia, al norte de Cáceres. ¿Su ideólogo? Enrique Vega. Ganadero de vocación desde hace más de 20 años. Este licenciado en Biología, supo llevar la vida a este trozo de tierra de 400 hectáreas y regenerar la castigada Dehesa Extremeña. Un problema al que nos enfrentamos debido a la crianza masiva, en la que la carga del ganado no deja que la Dehesa se regenere.












Enrique se dedica a la crianza de ternera ecológica, desde antes de que todo este mundo se pusiese de moda. Son tierras sin fertilizantes y en constante equilibrio con la naturaleza. Las vacas pastan a sus anchas y en una envidiable paz y libertad. Esto hace que se beneficien de alimento de calidad, de sol y de libre movimiento, rodeadas de otros animales como cigüeñas, garzas, galápagos, aves rapaces... lo que se traduce en salud y calidad para la carne de estos animales.






La ganadería que se cría en estas tierras, son razas autóctonas de la zona, por lo que están adaptadas al clima y a la vegetación que da esta finca, traduciéndose esto en mayor salud para el animal. Esto conlleva menos tratamientos farmacológicos y menos químicos perjudiciales en estas carnes.






Casablanca, nombre de la finca en la que se encuentran estas vacas, es reforestada con encinas y alcornoques, y son protegidos cuando son pequeños, con espino blanco (matorral autóctono), para que el ganado que pasta libremente no los dañe. Enrique se preocupa mucho de hacer rotar a sus animales, para que el entorno pueda seguir en un equilibrio constante y no se castiguen unas zonas más que otras. Además, colabora con la Universidad en varios estudios, uno de ellos relacionado con el daño que sufren las encinas debido a la larva de un parásito que termina acabando con ellas. Se cree que se produce por la carga de nitrógeno que adquiere el suelo, debido a las heces del ganado. El resultado de este estudio ayudará a conocer el porqué de esto y poner remedio a este problema común, en la Dehesa de nuestra tierra.






Así que este ganadero supervisa sus vacas para que éstas estén bien. No tiene que estar sujeto a horarios ya que su ganado come de lo que producen sus tierras, están a su aire. Dice que ser ganadero ya no es tan sacrificado como lo era en tiempos de su padre, existen más medios para que este trabajo sea más fácil que entonces. Es una de las ventajas de ser “ganadero ecológico”, así puede dedicarse a otros proyectos y compartir sus conocimientos sobre pastoreo y regeneración de la dehesa.





Si tengo que decir algo de Enrique es que se nota que ama la naturaleza, el equilibrio de su entorno, la belleza de lo que le rodea y ha sabido llevar sus conocimientos científicos a aquello que vivió desde niño y que quiere que perdure.

...Y desde el punto de vista de nuestra salud...

Todo esto, aunque parezca que no tiene importancia desde el punto de vista de la salud, puesto que lo fácil es ir a una gran superficie y comprar una bandeja de filetes cortaditos finos y listos para llevar y a un precio resultón, pues la tiene y mucha. Sí influye directamente en nosotros.

No es lo mismo carne de crianza convencional, estabulada, tratada con fármacos y alimentada a base de piensos y cereales, que carne ecológica de pasto que vive en libertad. Este tipo de carne, está demostrado que tiene una serie de beficios sobre la convencional:

Menos grasa. No es que las grasas saturadas sean malas como se nos ha estado diciendo hasta no hace mucho (el hombre ha evolucionado comiendo grasas saturadas), el problema mayor que se le achacan a las carnes grasas es que la mayor parte de los tóxicos se acumulan en las grasas del animal, por lo que todos esos tóxicos pasan a nuestro organismo y es muy difícil eliminarlos. Así que la recomendación, si te gustan las carnes grasas, consume carne de pasto ecológica, siempre en un equilibrio con otros alimentos. Una buena forma, en vez de acompañarlas con patatas o arroz, mejor mucho vegetal. Una buena guarnición de vegetales de todo color y está demostrado que si aliñamos o maceramos las carnes con especias (potentes antioxidantes y fuente de salud) antes de comerlas, se reducen los efectos negativos de dicho alimento y forma de cocinado.

La carne eco tiene más nutrientes, entre ellos, es más rica en proteínas, según Mª Dolores Raigón, que es una de las mayores expertas que tenemos en alimentación ecológica en este país. Es Doctora en Ingeniería Agrónoma, Catedrática de la Escuela Universitaria de la Universidad Politécnica de Valencia y es también autora del libro “Alimentos ecológicos, calidad y salud”. Su trabajo consiste en analizar la composiçión nutricional de los alimentos ecológicos y las diferencias que existen entre éstos y los alimentos de producción convencional. Estos estudios son concluyentes, no dejan lugar a dudas: la alimentación de los animales criados de forma eco, tienen una alimentación menos proteica y por ello se hace una mejor transformación de la ingesta y un mejor aprovechamiento de la proteína ingerida. Según contaba a la revista digital sobre alimentación “soy comocomo”, esta profesional.

Dejo el link de una entrevista a Maria Dolores Raigón. 

La práctica de la ganadería eco contribuye a tener menores resistencias a los antibióticos. Los antibióticos que se administran al ganado, criado de forma convencional, pasan a su carne y a nosotros cuando la ingerimos. Esto crea resistencias a estos antibióticos y se traduce en un menor efecto o efecto nulo, a la hora de tener alternativas para nosotros, en el caso de sufrir infecciones y necesitarlos ante un tratamiento.

Rica en ácidos grasos omega tres. Es un tipo de grasa necesaria para nuestro organismo, antiinflamatorio natural y que nuestro cuerpo no produce, por lo que debe estar incluida en nuestra dieta. Este tipo de carne tiene de 2 a 5 veces más ácidos grasos omega tres que la carne de crianza convencional, por lo que si alternamos estas carnes con buen pescado azul de pequeño tamaño (el pequeño tiene menos tóxicos), estaremos aportando buenas cantidades de omega tres. Las personas vegetarianas o veganas, pueden aportar este nutriente a su dieta, a través de las semillas de chía y lino trituradas, o suplementación.

Un estudio reciente de la Universidad de Lleída, concluye que la carne de animales alimentados con pasto, tienen más ácidos grasos saludables, cuatro veces más ácidos grasos omega tres que los alimentados con piensos y paja de forma convencional. Esto es igual a grasas beneficiosas y antiinflamatorias, son nutrientes esenciales que el cuerpo necesita y sólo los puede adquirir a través de los alimentos.

Más vitamina E. Antioxidante natural que potencia el sistema inmunitario y que estos animales extraen del consumo de las plantas herbáceas, y se encuentra en estas carnes, en una proporción de tres a cinco veces más que en la carne de cría convencional.

Gran cantidad de ácido linoleico que ayuda, junto con otras medidas, en la prevención del cáncer y que supera de tres a cinco veces en cantidad, a la carne convencional.

Contiene hasta siete veces más Beta carotenos (Vitamina A). Esta vitamina refuerza el sistema inmunitario.

No poseen hormonas ni antibióticos.

Libre de alimentos transgénicos. La mayor parte de la producción de estos alimentos se destina para hacer piensos para la crianza de animales.


Por último, decir que Enrique Vega comercializa esta ternera después de despiezarla, en una sala perfectamente habilitada para ello y que se encuentra en Plasencia, en Ambrosía. La sirve a grupos de consumo allá donde la demandan, cuidadosamente empaquetada al vacío y en los pesos que a uno le interese.








Para mayor información sobre este tema, no dudéis en poneros en contacto con él.
El Teléfono de Enrique Vega es: 606 60 11 39

Una cosa más, Enrique prepara visitas guiadas a su finca, para los grupos de consumo que quieran conocer su trabajo, de dónde vienen y cómo son cuidadas las terneras que consumen y tengo además que destacar, la gran generosidad y atención que ponen él y su mujer para que te encuentres como si estuvieras en casa.













domingo, 8 de mayo de 2016









HOY HABLAMOS DE FIBROMIALGIA Y GLUTEN.

En este post, una vez más, quiero hablar de los efectos que tiene lo que comemos y de cómo se relaciona con enfermedades que, hoy en día, se dan en nuestra sociedad. De cómo patologías como la Fibromialgia, enfermedad en la que duelen hasta las pestañas y a la que aún no se ha logrado dar un tratamiento curativo, solamente paliativo: ansiolíticos, antidepresivos, analgésicos... remite, en muchos casos, con una alimentación adecuada.
La Fibromialgia es una enfermedad en la que existe dolor en todas las partes del cuerpo, en TODAS. Es un dolor miofascial, muscular, profundo. No se salva una zona en la que no se sienta. Además, va rotando de un día para otro, es decir, que si hoy el codo, la nuca o las manos (sin dejar de sentir dolor en el resto del cuerpo), el dolor es tan fuerte que casi no puedes ni mover esas zonas, al día siguiente en esas zonas, ese dolor se habrá atenuado, intensificándose en otras. Y esto todos los días de la semana, de los meses y de los años y claro está, con sus noches. Así las personas que sufren de esta dolencia, ven afectada su capacidad para hacer todo tipo de labores: cuidar de sus hijos, trabajar, divertirse, lavarse, dormir, descansar, vivir...
Por si fuera poco, sufren otro tipo de síntomas además del dolor, como ansiedad (claro que con dolor en todo el cuerpo y durante todos los segundos de tu vida, ¿quién no va a tener ansiedad?), insomnio, fatiga muscular, problemas digestivos, adormecimiento de partes del cuerpo, falta de fuerza, incapacidad para el deporte... todo un viacrucis. Y además, por si no tuvieran bastante, se enfrentan a la incomprensión de sus médicos, amigos y familiares. Porque esta patología es tan caprichosa que no aparecen datos que la justifiquen en ninguna prueba médica. Todas: analíticas, resonancias, biopsias, electromiografías, pruebas de esfuerzo...todas son negativas. Por lo que al paciente se le suele tratar de hipocondría o de tener problemas psicológicos. Se suele no tener en cuenta su incapacidad porque, aparentemente, a estas personas no se les nota nada. Se les llega a ver como gandules, débiles u obsesivos. Ésta es otra losa que tienen que llevar sobre sus hombros, además de toda la sintomatología descrita.

Bien, hoy también quiero hablar de un médico que decidió no quedarse en los resultados negativos de las pruebas clínicas que les hacía a sus pacientes, ni en la apariencia normal que éstos presentaban. Este médico vio el sufrimiento que sus pacientes arrastraban segundo a segundo y confió, intuyó y vio que algo pasaba. No podía ser que tantas personas, con síntomas parecidos, anduvieran por la vida con tanto dolor y sin una causa real. Fue más allá de su especialidad y comenzó un estudio relacionado con la nutrición y la relación que existía entre el gluten y el padecimiento de Fibromialgia. De esto hace alrededor de nueve años. Su nombre es Carlos Isasi y es Reumatólogo en el Hospital Puerta de Hierro de Madrid.

Carlos Isasi, comprobó que eliminando el gluten de la dieta de estos pacientes, esta enfermedad remitía en un alto porcentaje de los enfermos estudiados. Además, también se aplicó a enfermos con otras enfermedades autoinmunes sistémicas y en enfermos con espondiloartritis. Todo está publicado en Reumatología Clínica, en la Revista oficial de la Sociedad Española de Reumatología. Esto, como dice él “ tiene gran relevancia”.

Dejo el link para aquellas personas que estén interesadas en el tema y recomiendo mucho, que se visite el facebook de este médico, porque tiene publicadas entrevistas muy interesantes, en las que se ve su gran vocación para con sus pacientes y su trabajo, nada compatible, como hace saber en dichas entrevistas, con la política que lleva la industria farmacéutica, más afín al dinero que se mueve con los tratamientos y pruebas que se nos hacen, muchas veces, innecesariamente.


¿Cómo trata Carlos Isasi a sus pacientes con Fibromialgia?

Primero les hace las pruebas de diagnóstico de la Enfermedad Celiaca: enfermedad autoinmune en la que el gluten que es una proteína del trigo, cebada y centeno destruye la pared intestinal. Estas pruebas, si dan positivas, se diagnostica al paciente de Enfermedad Celiaca y por tanto se eliminan todos los alimentos que contienen esta proteína. Si las pruebas dan negativas se eliminan, igualmente, los alimentos que contienen gluten. En este caso, si los síntomas de la Fibromialgia remiten, se diagnostica Sensibilidad al gluten no Celiaca. Lo ideal, para diagnosticar la Sensibilidad al gluten no Celiaca es, después de la remisión de síntomas, volver a reintroducir el gluten. Esto lo hacen o sugieren muchos gastroenterólogos, pero como dice Isasi, no es lo mismo hacerlo en personas que cursan con una sintomatología de diarrea y mala digestión a corto plazo, que la sintomatología que presenta una persona con Fibromialgia, la cual queda incapacitada a medio-largo plazo. Por lo que Carlos Isasi recomienda no volver a tomar gluten de por vida.
La información que debería recibir un paciente de este tipo, desde la consulta de su médico o enfermera, una vez hechas las pruebas para descartar la Enfermedad Celiaca, es que se debe dejar todo cereal con gluten: cebada, trigo y centeno. (La avena no tiene gluten pero en España está procesada en molinos y almacenes en la que procesan otros cereales con gluten, por lo que estaría contaminada y no se debería tomar) y todo aquel cereal que sea susceptible de estar contaminado.
También habría que dejar todo alimento procesado que pueda tener TRAZAS de gluten (INFORMACIÓN QUE SE DA EN LOS INGREDIENTES QUE LLEVA EL PRODUCTO COMPRADO), además de conservantes y colorantes que pueden alterar la microbiota intestinal y causar más inflamación y desajustes en el sistema inmunológico.

Cuidado con embutidos, jamones, chorizos, pimentón, especias...todo lo que se almacene o procese junto a alimentos que contengan gluten, puede estar contaminado.

Se considera alimento con gluten, todo aquel que tenga más de 20 partes por millón (20ppm), es decir, que una miga muy pequeña de pan, por ejemplo, en el caso de tener la Enfermedad Celiaca o tener Sensibilidad al gluten no Celiaca, se consideraría muy dañina.

No se recomiendan tampoco, los productos “especiales” que vienen preparados para celiacos ya que éstos contienen químicos y harinas muy procesadas que pueden inflamar más la pared intestinal y los efectos que estas harinas puedan tener, a medio-largo plazo, no se conocen.

También se recomienda eliminar, lácteos y maiz porque tanto la caseína de la leche (proteína de ésta que da más problemas que la famosa lactosa), como el maiz ( cereal muy modificado), generan una reacción similar al gluten.

¿Qué alimentos serían aconsejables?

Todo producto natural, poco o nada procesado, libre de gluten: frutas, verduras, carnes, pescados, aceite de oliva virgen extra, huevos, frutos secos y semillas que no estén contaminados por esta proteína (mirar envase para ver las trazas o comprarlos directamente a los agricultores con su cáscara y así evitamos cualquier posible contaminación).

...Y no comemos pan, pasta u horneados?

Lo ideal sería no tomar estos productos. Se puede vivir perfectamente sin ellos. No nos aportan nutrientes esenciales, no vamos a tener carencias por no tomarlos. Solamente es una cuestión de costumbre y cultural. Sí habría alguna opción más permitida y saludable, en el caso de no podernos pasar sin estos productos al principio:
  • Pan de trigo sarraceno sin contaminación por gluten, que se compra en tiendas especializadas.
  • Pasta de trigo sarraceno, también se llama soba (típica en Japón), sin contaminación por gluten.
  • Horneados caseros de trigo sarraceno o con harina desgrasada de almendras y coco.


¿Qué más se aconseja para el tratamiento de Fibromialgia?

Llevar una vida ordenada. Con horarios fijos. Tiempo para el relax, el descanso. Irnos a la cama temprano, para que nuestros ritmos se regulen, hacer deporte todos los días, en la medida que nuestro cuerpo nos vaya dejando avanzar: caminar, trotar, yoga, bicicleta, pilates...

En el siguiente link, podéis ver un vídeo del Dr. Carlos Isasi hablando sobre la influencia del gluten en la Fbromialgia. Muy recomendado.



Algo muy importante a tener en cuenta, al comenzar un tratamiento de este tipo,  es la paciencia que se debe tener, ya que al suspender el gluten y llevar una alimentación y estilo de vida ordenados, nuestro cuerpo empieza a hacer cambios y a curarse. Hay personas en las que los síntomas de mejoría aparecen en pocas semanas y otras que no notan nada hasta el año o más. Cada cuerpo manifiesta la autocuración a su propio ritmo.

martes, 19 de abril de 2016

El poder de los alimentos.


No subestimemos el poder de los alimento.

Hoy no traigo receta, pero sí un testimonio que espero sea muy valioso y esperanzador para las personas que creen en el poder de los alimentos, o no se atreven a creer en ellos como mecanismo para curarse o encontrarse mejor, de dolencias que puedan estar padeciendo.
Como dijo el Dr. Ordovás en la Noche temática: "...el alimento penetra hasta lo más íntimo de tus células".
La epigenética determina la capacidad que tienen los genes de moldear su comportamiento sin necesidad de cambiar su estructura. Esto es un mecanismo que nos ayuda a adaptarnos rápidamente, a los cambios de nuestro entorno. Son muchos los factores epigenéticos que nos influyen: estrés, alimentación, estilo de vida, agua, aire, tóxicos con los que convivimos...
La alimentación es el factor ambiental más importante que influye en la expresión o forma de comportarse de nuestros genes, tanto la que llevamos en la edad adulta como la que hemos llevado de niños e incluso, la que nuestra madre llevó durante su gestación. De tal forma que si estamos predispuestos genéticamente a padecer una enfermedad, podemos cambiar la expresión de nuestros genes con estilo de vida saludable, alimentación correcta y hacer que esta enfermedad no se manifieste, y de igual forma, si nuestra alimentación y estilo de vida no es el adecuado, esto desencadenaría la enfermedad o la agravaría. Quiere decir que los genes no determinan si vas a enfermar, solamente son responsables de la predisposición de padecer una enfermedad, aunque esto puede ser alterado por factores epigenéticos como la alimentación.
Sabiendo ya esto, ¿cómo no damos màs importancia a lo que comemos? ¿Cómo cuando nos detectan una enfermedad o bien un pequeño problema de salud, los sanitarios no hacemos énfasis en la importancia de la alimentación? Ésta debería ser tratamiento coadyuvante de la medicación pautada. Seguimos esperando que una pastilla, sin poner nada por nuestra parte, nos cure de todo mal.

En la Medicina Tradicional China, existe un dicho que me gusta mucho: "El padre puede ser cualquiera, la madre es la alimentación seguro."

A continuación os dejo la historia de Terry Whals, médico internista estadounidense, quien contrajo esclerosis múltiple y gracias a los cambios que hizo en su alimentación y estilo de vida, revirtió su enfermedad.




esclerosis múltiple enfermedades autoinmunes


Soy profesora de medicina en la Universidad de Iowa y en la mayor parte de mi carrera, creí sinceramente en el poder de la medicina moderna, en nuestros últimos grandes medicamentos, en nuestras intervenciones de procedimiento cada vez más expertas.
Durante muchos años, me centré en el tratamiento de la enfermedad, no en la creación de la salud, porque eso es lo que me enseñaron a hacer. Sin duda, no era un “médico del futuro”. (Ese es el término que Thomas Edison utiliza para describir a un médico que “no dará ningún medicamento, sino que interesará a sus pacientes en el cuidado y del cuerpo humano, la dieta y en la causa y prevención de la enfermedad.”) Ahora, sin embargo, yo aspiro a ser un médico del futuro. Déjame decirte por qué.
En el año 2000, me diagnosticaron esclerosis múltiple, una enfermedad autoinmune que daña el cerebro y la médula espinal, y es la causa más común de discapacidad temprana en E.U. Me dijeron que la esclerosis múltiple era probablemente debido a una infección previa y factores ambientales desconocidos. Nadie me preguntó o mencionó sobre el estilo de vida, pero sí sobre medicamentos.
Me dijeron que era importante para mí tomar uno de los medicamentos ABC (Avonex, Betaseron, o Copaxone). Estos fármacos modificadores de la enfermedad podrían disminuir la probabilidad de un ataque de esclerosis múltiple agudo o una recaída en un tercio. Esto costaría cerca de mil dólares al mes. Hoy en día, los fármacos modificadores de la enfermedad de la esclerosis múltiple, cuestan más de 4,500 dólares al mes. Ese precio viene con una larga lista de efectos tipo gripales, como dolores en el cuerpo, depresión, úlceras bucales, problemas del corazón, un mayor riesgo de infecciones que amenazan la vida, e incluso la muerte. Sin necesidad de decir que un diagnóstico de esclerosis múltiple, presenta un futuro aterrador.
Pero, ¿qué otra cosa podía hacer?


Estaba asustada. Estaba aterrada. ¿Cómo voy a mantener ahora a mi familia? Fui al mejor centro de esclerosis múltiple que pude encontrar: la Clínica Cleveland. Vi a los mejores médicos, recibí la mejor atención posible a juicio de la medicina convencional, y tomé esos últimos y mejores medicamentos.
Pero el problema era que yo seguía disminuyendo lentamente. Podía sentirlo, y mi familia podía verlo. A medida que los años pasaban, tuve un tiempo cada vez más difícil por la fatiga y la resistencia. Cuando ya no podía correr unos pocos pasos, tuve que dejar de jugar al fútbol en el patio con los niños. Las caminatas y actividades atléticas estaban fuera también. Después de haber sido siempre una mujer atlética competitiva, activa, esa fue una de las cosas más difíciles a las que tuve que renunciar. Veía desde la ventana como la familia jugaba sin mí.

Dieta Paleo

Entonces hice una serie de descubrimientos. En el 2002, descubrí la Dieta Paleo, por Loren Cordain, Ph.D., quien abogó por una dieta de estilo cavernícola como tratamiento para las enfermedades autoinmunes como la esclerosis múltiple. Aunque yo había sido vegetariana desde hace casi dos décadas, decidí seguir su consejo. Poco a poco, acepté carne en mi dieta y renuncié a los cereales y legumbres que habían sido uno de mis pilares durante más de una década. Mi declive se desaceleró, pero continuó. La dieta Paleo por sí sola no era suficiente.
En 2003, mis médicos me dijeron que mi enfermedad había hecho la transición a la Esclerosis Múltiple secundaria progresiva. Tomé los medicamentos de quimioterapia recomendados, Tysabri y luego CellCept, y me dieron una silla de ruedas reclinable porque ya no podía sentarme por mucho tiempo. Vi que la medicina convencional me estaba fallando. Sentía cada vez más miedo, tanto yo como mi familia, porque era claro para todos que pronto estaría postrada en cama.

Disfunción mitocondrial

Queriendo evitar eso, me fui en una búsqueda desesperada de información. Consideré que en la esclerosis múltiple, el cerebro se redujo con el tiempo, como lo hace con Huntington, el Parkinson y el Alzheimer. Comencé a buscar en PubMed.gov, un sitio web que es un centro de intercambio de artículos de investigación médica, y las últimas investigaciones sobre todas estas enfermedades, y descubrí un tema común: la disfunción mitocondrial. Las mitocondrias son orgánulos dentro de las células que trabajan para producir energía.
En todas estas enfermedades, las mitocondrias no funcionan muy bien, lo que provoca la temprana muerte de las células del cerebro y contracción cerebral. Pero, ¿qué proponen los investigadores se podía hacer al respecto? Con más búsqueda, identifiqué estudios sobre cerebros de ratones protegidos por el aceite de pescado, la creatina, y la coenzima Q. Lista para probar lo que sea, yo traduje esa dosis de ratones a tamaño humano y comencé mi primera ronda de autoexperimentación. La rapidez de mi declive se desaceleró de nuevo, pero continuó. Los suplementos no eran suficientes.
Para el año 2007, yo estaba luchando con tanta fatiga y confusión mental que no podía sentarme en una silla normal nunca más. Necesitaba una silla de gravedad cero o la cama. Pensé que probable que tendría que dejar de trabajar y solicitar la discapacidad en el próximo año, pero a medida que continuaba buscando a través de estudios todas las noches con la tenacidad de un perro con un hueso, hice dos más grandes descubrimientos que cambiarían mi vida.

Terapia de estimulación eléctrica neuromuscular

El primero fue el descubrimiento de la terapia de estimulación eléctrica neuromuscular, también llamado e-stim. Leí la investigación sobre la forma en que había ayudado con atrofia muscular en las personas con parálisis. Le pedí a mi fisioterapeuta una sesión de prueba. Me dolió, pero también me sentía eufórico al final, probablemente por las endorfinas liberadas durante la sesión. Empecé un programa de ejercicio diario, junto con estimulación regular. Al principio, yo estaba tan débil que sólo podía hacer 10 minutos de movimientos al día, pero cuanto más lo hacía, más fuerte me ponía. También empecé a meditar, para gestionar el estrés.

Medicina funcional

Al mismo tiempo, descubrí el Instituto de Medicina Funcional y su curso de educación médica continua, Neuroprotección: Un Enfoque de Medicina Funcional de síndromes neurológicos comunes y no comunes. Salí de ese curso con una lista de vitaminas y suplementos que mi cerebro, células y mitocondrias necesitaban para un funcionamiento óptimo por mucho más tiempo.
Poco a poco, empecé a hacerme más fuerte. Yo estaba muy emocionada. Ya no estaba rechazando. Yo ya sabía que no tenía ninguna esperanza de recuperación, que había aceptado lo que mis médicos me habían dicho una y otra vez, que las funciones una vez perdidas con la EM progresiva se irían para siempre.

¿Alimentación o píldoras?

Mi siguiente descubrimiento fue más una realización personal. Decidí que si estos nutrientes añadidos podrían hacer tal impacto en mí,  debería llegar a ellos a través de la comida de verdad en vez de píldoras. ¿No estarían aún más potentes, aún más reconocibles para mi cuerpo, y aún más adecuadamente “empaquetados” por la naturaleza?
Además, pensé que probable las vitaminas que se producen en los alimentos eran más poderosas que las versiones sintéticas que estaba tomando, pero ¿dónde puedo encontrar mi larga lista de nutrientes en los alimentos? Ni los textos médicos ni los textos de ciencias de los alimentos tenían ese tipo de información. Afortunadamente, el Internet lo hizo, y al usarlo, yo era capaz de crear un plan de alimentación diseñado específicamente para mis neuronas y mi mitocondrias: verdes vegetales ricos en azufre, verduras de colores intensos y bayas, carne de animal alimentado con pasto, peces silvestres, y algas. Comencé un nuevo régimen de creación propia de nutrición intensa basada en mi investigación.

Recuperación

Es entonces cuando la magia comenzó a suceder. Al mes siguiente, mi energía era mucho mejor y la niebla del cerebro se había ido. Dos meses más tarde, yo estaba caminando entre las salas de examen utilizando un bastón. Seis meses más tarde, me monté a mi bicicleta por primera vez en casi seis años. A los 9 meses, completé un paseo en bicicleta de 18 millas con mi familia. Mi mundo había cambiado por completo.
Finalmente me permití verlo: me estaba poniendo mejor. Yo estaba haciendo historia. Nadie con esclerosis múltiple progresiva secundaria recupera las funciones que se han perdido. Mi futuro estaba siendo reescrito, y el viejo yo, el médico de medicina interna convencional que tenía poca paciencia para la medicina complementaria o alternativa, había sido golpeada como Pablo en el camino a Damasco.
Ahora entiendo tanto a nivel intelectual y literalmente, a nivel celular, el poder de comer y vivir para la salud de las células y las mitocondrias. Cambié la manera cómo practicaba la medicina. También escribí una subvención y financiación garantizada para poner a prueba mis intervenciones en otros con con esclerosis múltiple progresiva. Hice una charla en TEDx, Minding your mitocondria, sobre mi experiencia, charla que ha recibido más de 1,5 millones de visitas en línea.

Libro El Protocolo Whals

Escribí un libro, “El Protocolo Wahls: Cómo combatí la esclerosis múltiple progresiva usando principios del paleo y medicina funcional”, entrando en detalles sobre lo que hice y lo que otros pueden hacer. Se ha convertido en mi misión de ayudar a otros a reescribir su futuro, también.
Estoy agradecida por tener EM. Es uno de los más profundos regalos que he recibido. Ahora sé que la dieta y el estilo de vida pueden ser totalmente transformadora. Todos podemos abrazar la salud para nosotros, nuestras familias, nuestras comunidades, nuestros países, nuestro mundo. Todos podemos crecer más joven, más fuerte, más saludables, más sexys, consumiendo una dieta profundamente rica en nutrientes, dando a nuestras células lo que necesitan para sanar y prosperar. Si puedo hacer estos profundos cambios en mi salud, imagínate lo que podrías hacer por la tuya.
La Dra. Terry Wahls es profesora clínica de medicina en la Universidad de Iowa donde enseña a residentes de medicina interna, ve a los pacientes en una clínica de lesión cerebral traumática, y lleva a cabo ensayos clínicos. Es también paciente con una enfermedad crónica progresiva neurológica, esclerosis múltiple secundaria progresiva, que la confinó a una silla de ruedas por cuatro años. Pero gracias al poder del Protocolo Wahls  ™, que se basa en la medicina funcional y la dieta Paleo Wahls ™, la Dra. Wahls restauró su salud y ahora pedalea en su bicicleta cinco millas hacia su trabajo cada día.
Redacción: Vida Lúcida

http://www.lavidalucida.com/curar-esclerosis-multiple-con-dieta-y-medicina-funcional.html





miércoles, 13 de abril de 2016

Ajo negro.




Creo que es un ingrediente a tener muy en cuenta, a la hora de utilizar en nuestros platos, tanto desde el punto de vista culinario como de la salud. Tiene un sabor afrutado, entre mora confitada y regaliz negro. Nada que ver con el sabor y olor natural del ajo crudo. Así que si no nos gusta el sabor y olor de éste, el ajo negro es una buena opción. Curiosamente, se descubrió intentando eliminar el fuerte olor que desprende el ajo crudo. Un investigador japonés, queriendo crear ajo sin olor, lo sometió a un proceso de ahumado y fermentación durante treinta días, así descubrió que había perdido el 97% del olor característico del ajo crudo y que además, las propiedades de este último, aumentaron hasta 10 veces más.

Sus bondades para la salud son las mismas que las del ajo crudo, pero debido a la  fermentación que sufre, aumentan 10 veces como he dicho, excepto en el poder antibiótico que tiene el ajo crudo, que es mayor. 

Es el ingrediente más destacado de 48 alimentos estudiados e identificados para la prevención del CÁNCER, según estudios realizados por el Instituto Nacional del Cáncer. Dejo enlace:http://www.cancer.gov/cancertopics/factsheet/prevention/garlic-and-cancer-preventionSus antioxidantes ayudan, entre otras cosas, en la prevención de las enfermedades cardiovasculares, ya que fluidifica la sangre, ayudando en problemas circulatorios.

Es rico en potasio tanto la forma cruda como la fermentada, por lo que ayuda a eliminar exceso de líquido.

Puede tener efecto laxativo por ello estaría indicado en caso de tránsito intestinal  lento.

Es rico en tiosulfinatos compuestos muy necesarios para la formación de estructuras como piel tendones, huesos... por este motivo se recomienda en problemas osteoarticulares y musculares. 

¿Cómo lo podemos tomar? Solo o como condimento de nuestros platos: carnes, pescados, verduras, etc. Si buscamos su efecto terapéutico, se aconseja tomar en ayunas de 1 a 3 dientes. No durante la noche, por el efecto energizante que tiene. Por esto, es mejor tomarlo antes de realizar actividad física.

Ahora ya lo podemos encontrar como producto nacional. En las Pedroñeras, Cuenca, donde se cultiva ajo crudo de gran calidad desde generaciones, no hace muchos años se comenzó a fermentar con la colaboración de técnicos japoneses. Se ha llegado a tener un producto muy apreciado por la alta cocina. 

De destacar es que no lleva fertilizantes, es un producto cultivado de forma natural, tampoco lleva aditivos para su fermentación ni almacenaje. 

Es un mercado que va en auge, Córdoba también se ha sumado a la producción del ajo negro y de hecho ya se comercializa. Por otro lado, Asturias se ha lanzado con la tintura de ajo negro que no es otra cosa que jugo de ajos negros y se toma en forma de gotas, disuelto en un poco de agua o directamente sobre la boca, con fines medicinales.

En este blog vimos, hace dos entradas, un plato de falso risotto con vinagreta de ajo negro... por si os apetece probar este ingrediente, aunque también está vuestra imaginación para aprovechar su sabor, textura y propiedades en los platos que más os gusten.

¿Os apetece ajo negro?